La entrada en escena de los espacios educativos virtuales aporta grandes ventajas que complementan positivamente el proceso educativo tradicional. Sin embargo, el trabajo con las TIC implica cambios en muchas áreas, y también algunos riesgos.
La introducción de las TIC en el proceso educativo aporta los siguientes beneficios potenciales:
Descentralización del proceso educativo: El seguimiento de las clases desde lugares geográficamente distantes, ya sea de forma síncrona o asíncrona, potencia la enseñanza a distancia, las tutorías no presenciales, los seminarios virtuales, foros de discusión, videoconferencias o publicación de documentos en formato digital.
Aumento de la calidad y la accesibilidad de los materiales didácticos: Los multimedia cambian el concepto del libro tradicional, no buscando suplantarlo sino completarlo. El texto y las fotografías se ven completadas ahora con datos en cualquier tipo de formato imaginable (vídeo, animación, sonido…) y localizados en cualquier lugar del mundo.
Grupos de trabajo cooperativo: Ofrecen la posibilidad de que varias personas trabajen juntas utilizando ordenadores y tecnología informática, facilitando el trabajo en equipo y un intercambio eficiente de información. Ejemplos de servicios de este grupo serían entre otros los seminarios virtuales con varios participantes activos.
Acceso universal a los recursos: Permitiendo acceso a recursos localizados de prácticamente cualquier parte del mundo. Ejemplo de este servicio son las páginas web, que ofrecen información genérica estructurada y dispuesta de forma eficiente para un uso específico.
Procesos de aprendizajes personalizados: Al tener acceso a materiales didácticos de calidad dentro de un proceso educativo asíncrono, el alumno puede progresar según su capacidad y tiempo.
Capacidad de adaptación o configuración del entorno de trabajo: El contexto de trabajo del usuario se adapta dependiendo de su nivel, su idioma u otras características, permitiendo un rendimiento más óptimo del interesado.
No obstante, las TIC presentan también constricciones y riesgos más que desventajas o inconvenientes, normalmente derivados de su mala utilización o de su comprensión equivocada.
Cambio del proceso educativo: Profesores y alumnos deben aprender a manejar estas nuevas herramientas, replanteando la naturaleza de la enseñanza que permite canalizar el conocimiento y experiencia del profesor en materiales didácticos.
Dispersión de la información: Internet es una fuente inagotable de conocimiento, la mera existencia de información no basta para configurar un espacio virtual educativo; debe ser información contrastada, clasificada y accesible a través de los medios oportunos.
Falta de calidad en los componentes educativos software: Los servicios educativos ofertados en un espacio virtual no siempre tienen la calidad suficiente para su uso efectivo. La calidad debe mirarse desde las perspectivas técnica y pedagógica, de forma que los componentes cumplan los requisitos para los que fueron diseñados, pero además lo hagan de forma que ayuden al proceso educativo.
Evolución del concepto de profesor y alumno.
LOS PROFESORES, Pasa de jugar el papel de proveedor del conocimiento a un rol de facilitador, asesor, motivar y consultor del aprendizaje. Su interacción con el alumno no será ya mas para entregarle un conocimiento que posee, sino para compartir con él sus experiencias, apoyarlo y asesorarlo en su proceso de aprender y especialmente para estimularle y retarle su capacidad de aprendizaje. Deber ser el autor de que cada alumno cree su propio paradigma, se apropie y sea dueño de sus saberes para luego compartirlos con otros y así crecer. Debe por tanto este profesor ser el facilitador del aprendizaje, aprovechando para ello no solo su interacción presencial, sino también la virtual. El profesor entonces jugara su papel de siempre la del ser el maestro.
EL ALUMNO, El alumno no será mas el receptor pasivo de un conocimiento que se le entrega para que se lo aprenda y luego lo repita ante su transmisor. No será mas un actor pasivo de su aprendizaje. El alumno del futuro será autónomo para su aprendizaje. Avanzara a su propio ritmo, crecerá con su propio aprendizaje.